MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
Carlos L.P., el asesino confeso de la joven dominicana Nairobys Y.A., ha asegurado en su declaración en el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid que «nunca» tuvo «intención de matarla» y ha manifestado que no recordaba «absolutamente nada» de los sucedido la noche del 20 de junio de 2009, en la que le asestó hasta doce puñaladas.
El procesado, que ha permanecido durante toda la sesión con la cabeza oculta bajo sus brazos, se enfrenta a veinte años de prisión por un delito de asesinato. La acusación particular solicita la misma pena que la Fiscalía de Madrid, mientras que la Abogacía del Estado la rebaja a 15 años de cárcel por homicidio.
En su declaración, el acusado ha relatado que la noche del crimen se encontró con su expareja en una discoteca y decidieron ir a su domicilio, donde se encontraba la madre del agresor y su pareja. Según su testimonio, no recuerda nada más de lo sucedido aquella noche.
A preguntas sobre si tuvo intención de matar a la joven, el procesado ha contestado que «nunca». «Nunca tuve intención de matarla», ha aseverado el encausado, quien ha reconocido que tiene problemas con el alcohol y las drogas.
Por su parte, la madre del agresor ha relatado que esa noche se encontraba durmiendo, cuando escuchó gritos alrededor de las 6 de la madrugada. «Cuando la vi, sentada y ensangrentada, salí corriendo», ha recordado entre sollozos.
La testigo ha contado que su hijo contaba ya con una denuncia por malos tratos con motivo de una discusión que se produjo unos meses antes en la que, según su versión, no hubo agresión alguna. «Ella quería salir de casa ese día y no quería quedarse con la niña. No pasó nada», ha señalado.
«CREÍA QUE ERA SUYA»
Asimismo, la madre de la chica ha señalado que la relación de su hija con el agresor era «tormentosa», ya que él era «muy violento». «Creía que era suya», ha denunciado la mujer, que lucía una camiseta que rezaba: «Siempre te recordaremos».
Uno de los policías locales que ha comparecido ha indicado que la propia víctima llamó a la comisaría para alertar del suceso. «Decía que se moría», ha señalado uno de los agentes. Tras ello, se mandó una patrulla para comprobar lo que estaba sucediendo.
A su llegada, los agentes tardaron en presentarse en la casa, ya que nadie les abría la puerta. Tras unos minutos, la madre abrió y se encontraron a una mujer sentada en el suelo, llena de sangre y que decía «ha sido Carlos, ha sido Carlos».
Según los agentes, la mujer presentaba varias puñaladas, una de ellas en el cuello a la altura de la traquea. «Pensamos que no era tan grave, pero al llegar a comisaría nos comentaron que había fallecido», ha dicho.
HECHOS JUZGADOS
El acusado se encontraba el 20 de junio de 2009 a las 06.00 horas en el dormitorio junto a su ex pareja, de nacionalidad dominicana, en una vivienda de Fuenlabrada. Ambos tenían una hija común de dos años.
En un momento dado, el acusado cogió un cuchillo de cocina, que tenía habitualmente en su habitación y que usaba para comer, con la intención de acabar con la vida de la mujer. Carlos L. P. asestó hasta doce puñaladas a la mujer, lo que causó su muerte por pérdida masiva de sangre.
El acusado huyó inmediatamente del lugar de los hechos y se desprendió del cuchillo. Carlos L. P. fue detenido el mismo día 20 de junio de 2009, acordándose la prisión provisional, situación en la que permanece actualmente.
Fuente: http://www.que.es/madrid/201107061407-asesino-confeso-nairobys-nunca-tuve-epi.html
