Si nos atenemos a los rumores, la principal razón por la que Apple aún no ha lanzado un iPhone plegable es que hasta ahora no ha conseguido crear un diseño que cumpla los altos estándares de calidad y durabilidad. Quizá la solución al problema esté a la vuelta de la esquina. La empresa de Cupertino ha patentado una tecnología para crear una pantalla "eterna" para teléfonos flexibles.
Según la descripción, constará de tres partes principales: dos capas rígidas y una sección flexible que las conectará. Se menciona una capa de elastómero que puede estirarse y recuperar su forma original. Esto permitirá a la pantalla autorrepararse tras sufrir daños.
La tecnología funcionará de forma autónoma, pero puede "autoiniciarse o acelerarse" en caso necesario. No se han revelado otros detalles. TechRadar escribe que todo esto implica también la aparición de algunos nuevos conductores, que afectarán al calor, la luz o la corriente para iniciar el proceso.
Todo suena muy prometedor y esperanzador, pero conviene recordar que no todas las patentes llegan a la fase de prototipo, y mucho menos a la de implementación en un dispositivo comercial. Cómo será en este caso, sólo lo sabremos en 2026, cuando se espera el tan esperado lanzamiento del iPhone plegable.