Las pantallas redondas y los biseles giratorios son la marca de fábrica del Samsung Galaxy Watch. Sin embargo, estos accesorios no siempre fueron como estamos acostumbrados a verlos. Los primeros smartwatches de la marca -entonces Galaxy Gear- tenían pantallas rectangulares, y en la nueva generación de relojes el fabricante podría volver de nuevo a esta forma.
Probablemente ya estemos hablando del Galaxy Watch 7, que podría anunciarse a finales de este año. Con un nuevo diseño y una pantalla rectangular, este reloj se parecerá más al Apple Watch, lo que le ayudará a competir mejor por la atención de los posibles compradores. Pero esta moneda tiene dos caras.
Si el Galaxy Watch será exclusivamente rectangular, Samsung corre el riesgo de perder a su público actual, acostumbrado a soluciones redondas. Y los que esperaban actualizar sus relojes este año o el que viene pueden pasarse al Pixel Watch o al TicWatch, por ejemplo.
Al mismo tiempo, hay que tener en cuenta que el bisel giratorio y la pantalla rectangular no son muy compatibles. Es decir, la transición a una nueva forma privará al reloj de su característica distintiva, que los seguidores de la marca apenas han recuperado (tras su abandono en el Watch 5).
Por otro lado, una pantalla rectangular es más cómoda para leer las notificaciones y los eventos del calendario, permite un uso más racional del espacio de trabajo en las aplicaciones y ofrece a los usuarios más datos útiles. Que Watch OS se adapte a este formato es una gran incógnita. Al fin y al cabo, hace tiempo que nadie lanza smartwatches con pantalla rectangular y plataforma Google.
Estamos a la espera de más detalles que puedan aclarar esta situación. De momento, todo son rumores.