La empresa china Xpeng AeroHT ha presentado dos prototipos de coches del futuro. Ambos son completamente diferentes y ofrecen formas insólitas de viajar.
El primero, denominado Modelo A, tiene un aspecto similar al de un cupé de dos puertas. Pero lleva hélices plegables y puertas transparentes para aumentar la visibilidad en vuelo. En la parte trasera hay faros LED y enormes rejillas de ventilación.
En lugar de retrovisores se utilizan cámaras. Tampoco hay tiradores en las puertas. Estas características externas están diseñadas para reducir la resistencia durante el vuelo y la conducción.
La característica principal son los rotores situados en el techo. Hay un total de ocho piezas fijadas al bastidor. Y pueden ocultarse dentro de la carrocería, lo que hace que el coche sea más compacto y seguro al circular por carretera. Sin embargo, los desarrolladores no demostraron esta opción durante la presentación. Admitieron que esta parte del diseño es la más complicada.
El coche volador pesará unos 1.000 kilogramos. Anteriormente, incluso se habló de su precio: un millón de yuanes (≈13 millones de rublos). Aunque su debut está previsto para 2024, el prototipo aún parece muy rudimentario y, al parecer, está lejos de la producción en serie.
El segundo prototipo fue el vehículo modular Modelo B. Es radicalmente distinto de la primera versión: consta de un portador terrestre ("nave base") y un dron volador, y tiene el aspecto de un monovolumen o un camión compacto.
La parte trasera del coche futurista tiene seis ruedas. El interior tiene seis asientos. El dron eléctrico admite control manual y automático. Y está diseñado para sólo dos pasajeros.
La empresa afirma que este coche modular es su próxima tendencia de producción en serie. Además, ahora es una prioridad, ya que un coche transformable es mucho más difícil de desarrollar.
Xpeng AeroHT, que es una división del conocido fabricante de vehículos eléctricos XPeng, se fundó en 2013. En 2016, la empresa desarrolló su primera máquina voladora. Le siguieron cinco más, que parecían más bien drones. El prototipo del primer coche verdaderamente volador se mostró en otoño de 2022.