"Luna-25", la primera estación lunar rusa en 47 años, se estrelló en la superficie del satélite el 19 de agosto durante una maniobra de preparación de la órbita previa al aterrizaje. El Lunar Reconnaissance Orbiter (LRO) de la NASA, que sobrevolaba el presunto lugar del accidente, encontró un nuevo cráter que no había estado allí antes. Se trata probablemente del lugar donde se estrelló la estación.
Dado que este nuevo cráter está cerca del supuesto punto de impacto de Luna 25, el equipo de la LRO concluye que es probable que se formara por la misión y no por un impacto natural.
El comunicado señala que el nuevo cráter tiene unos 10 metros de ancho y está situado a unos 58 grados de latitud sur, en el escarpado borde interior del cráter lunar Pontecoulant G. El lugar del impacto se encuentra a unos 400 kilómetros del lugar previsto para el aterrizaje del Luna 25.
"Luna-25" fue lanzado el 11 de agosto. La estación podría haber sido la primera nave espacial nacional en la superficie del satélite desde 1976 y la primera sonda al polo sur de la Luna, una región que puede ser rica en hielo de agua. Sin embargo, tras estrellarse, el módulo de aterrizaje indio Chandrayaan-3 se convirtió en el primero. Se posó suavemente el 23 de agosto y ya está enviando imágenes.
