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En la noche de Año Nuevo, la actriz llamó a la policía por un confuso episodio en su mansión de Los Ángeles.
Recibiendo el 2012 en su mansión de Los Ángeles, la actriz Lindsay Lohan se llevó un gran susto cuando un intruso se acercó hasta su casa e insistió en hablar con ella.
El episodio ocurrió cerca de las 6 de la mañana cuando un hombre comenzó a golpear insistentemente la puerta Lohan. Cuando la actriz se acercó hasta la entrada e intentó amablemente pedirle que se retire, el fanático se negó a partir. Lindsay, muy asustada, empezó a los gritos.
Minutos más tarde llegó la policía y detuvo al hombre que, según declaró, sólo pretendía hablar con la protagonista de la última edición de Playboy.
