Es diminuto, rosado, arrugado, casi completamente ciego y nada atractivo. Sin embargo, la rata topo lampiño posee un gen especial que podría ser la solución para combatir el cáncer, pues este animal sería resistente a dicha enfermedad.
Así, si es que se llega a identificar las causas genéticas de ello, se podría avanzar en investigaciones sobre las causas del mal, según afirmaron científicos de la Universidad de Liverpool.
Este curioso animal, originario de los desiertos del este de África, donde pasa el día cavando túneles bajo tierra, puede llegar a vivir hasta 30 años, a diferencia de la mayoría de especies de roedores que solo viven cuatro años en promedio.
Además, hasta el momento ninguno de los ejemplares que ha sido estudiado ha muerto de cáncer, enfermedad común en ratas y ratones mayores. Por ello, los científicos tienen la esperanza de que su genoma brinde información valiosa sobre lo que esconde su ADN respecto al largo tiempo que viven y su resistencia al cáncer, informó la BBC.
NO TIENEN SENSACIÓN DE DOLOR
El director de la investigación sobre las ratas topo lampiñas de la Universidad Queen Mary, Joao Pedro Magalhes, explicó que dicho roedor tiene características físicas únicas que le permiten vivir con normalidad en difíciles ambientes subterráneos.
Asimismo, aseguró que no tienen sensación de dolor en su piel arrugada y que pueden sobrevivir con oxígeno limitado.
Por su parte, el médico Chris Foulkes, quien también participa en la investigación, añadió que estos animales viven en grupos de hasta 300 ejemplares y que “cada grupo tiene una reina (reproductora activa) que puede “apagar” la reproducción en otros ejemplares”.
Por Agencia EFE
