No sabía porque me dolía la cabeza
La mujer de 50 años de edad, asesora del Departamento de Justicia se dio cuenta que tenía que atravesar vidrios rotos y metales retorcidos en su camino, pero no tenía idea que una astilla de madera de 20 centímetros se había alojado en su cabeza.
El fragmento que parecía una punta de lanza del marco de una ventana de madera destrozada, provocó la perdida de un poco de su cerebro, después de haberse alojado en la parte superior de su cráneo.
“Tenía un terrible dolor de cabeza, pero no podía entender por qué. Me puse tan aterrada cuando me di cuenta que había algo en mi cabeza. Pero tengo la suerte de estar viva”, dijo Nersnaes
De vuelta al trabajo hoy en día, una semana después de estar en el centro del peor atentado 
terrorista de Noruega, Nersnaes ha descrito su terror cuando se hizo evidente lo cerca que había estado de morir.
“Estaba en mi escritorio cuando sentí una explosión violenta, la onda de choque llenó toda la habitación. los cristales de las ventanas se laminaron pero no se rompieron, pero el marco de la ventana se astilló y vino hacia mí y me golpeó en la cabeza”.
“Me encontré sentada de espaldas a la pared , cómo a 3 metros de distancia de donde estaba sentada. Tenía un terrible dolor de cabeza, pero no podía entender por qué”.
La Sra. Nersnaes ahora está de vuelta en el trabajo, no tiene una computadora y trabaja en un escritorio sólo con papel y lápiz.
