Djokovic destrona Nadal.

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Djokovic destrona Nadal.

Cuando Novak Djokovic se dio cuenta que era el campeón de Wimbledon, se derrumbó en el piso y acarició el césped, como si estuviese en su cama.

Fue una celebración perfecta para un tenista cuya tenacidad para cubrir cada rincón de la cancha fue vital para poder destronar 6-4, 6-1, 1-6, 6-3 al campeón vigente Rafael Nadal en la final del domingo.

Djokovic será el nuevo número uno del mundo, desplazando al español, a partir del lunes. También extendió su dominio sobre Nadal esta temporada, al hilvanar una quinta victoria en fila.

Después que le estrechó la mano a Nadal en la red, Djokovic volvió a la cancha y se agachó. Arrancó algo de hierba y se la llevó a la boca.

“Cuesta mucho describir esto con palabras, salvo que este es el mejor día de mi vida, el día más especial de mi vida”, dijo Djokovic, quien arrojó tres de sus raquetas al público antes de recibir el trofeo de campeón.

“Este es mi torneo favorito, el torneo que siempre soñé ganar. El primer torneo de tenis que vi en mi vida”, añadió.Djokovic se había asegurado el máximo sitial de la clasificación mundial tras haber alcanzado la final en el All England Club. El serbio comenzó la temporada con una fabulosa racha de 41 triunfos, incluyendo la corona del Abierto de Australia. Pero su racha de 43 triunfos consecutivos se acabó al estrellarse contra Roger Federer en las semifinales del Abierto de Francia.

La victoria sobre Nadal dejó en 48-1 la foja de Djokovic en 2011. Cinco de los triunfos contra el español han sido en finales, dos en superficie dura, dos en polvo de tierra y ahora uno en césped. Este es el primer título en césped de su carrera.

“Para ganar un partido como el de hoy, hay que jugar bien los puntos importantes, esos que pueden cambiar el curso del partido. Y hoy no lo hice”, sintetizó Nadal.

El presidente serbio Boris Tadic estuvo presente en Palco Real junto a varios ex campeones para presenciar el partido en la Cancha Central, y cuando Nadal mandó larga una devolución de revés en el match point, Djokovic les miró y se desplomó de la alegría.

“Cuando se juega contra el mejor tenista del mundo, Rafael Nadal, quien ha ganado dos de los últimos tres Wimbledons, y siempre me vence en los grandes partidos en los Grand Slams, tenía que estar con mi máximo nivel. Tenía que jugar al tope y creo que, de veras, este ha sido mi mejor partido en césped”, dijo Djokovic.