Madre de los 3 Niños Muertos no supera la Crisis
Yoselín, amiga de la madre, y quien la acompañaba la noche del siniestro, recuerda que la primera respuesta de Orquídea fue el desmayo. Tras recobrar el conocimiento, lloró. Luego trató de entrar al rancho de madera y zinc en llamas. Finalmente cayó en crisis.
Esa noche, Orquídea fue sedada, pero todavía ayer, horas antes de iniciar el velatorio en el barrio sólo gritaba por sus hijos mientras miraba a todos lados.
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María Muñoz, vecina de los tres niños, cuya casa quedó destruida, pasó la noche del fuego sentada en la galería de un vecino. Perdió lo poco que tenía, pero nada le ha marcado más que haber escuchado a los niños gritar en la puerta, mientras la vivienda se redujo a ceniza.
Cuenta que el mayor de ellos, Gabriel, fue encontrado por la puerta trasera y Jonathan en la entrada de la vivienda. «Esa puerta no se abrió por golpe que le dio la gente, parecía como si estuviera sellada», cuenta. En tanto que la madre asegura que dejó la puerta junta, y no la trancó.
El calor pudo haber provocado esa reacción. Pero la madre de Orquídea, Marcela de la Cruz Belén, asegura que fueron manos criminales quienes ocasionaron el fuego.
De OMAR SANTANA
