La empresa japonesa Astroscale ha publicado una imagen única que muestra la etapa superior del cohete H-II. Este portador fue lanzado en 2009 y, tras el lanzamiento del satélite, la etapa superior permaneció en órbita como un residuo espacial de gran tamaño. El tamaño de la etapa es de 4 por 11 metros.
Astroscale está desarrollando un sistema para limpiar la órbita terrestre de este tipo de elementos peligrosos. El vehículo de demostración ADRAS-J, de 150 kilos, fue lanzado el 18 de febrero con el cohete Electron de Rocket Lab. La sonda fue controlada desde la Tierra durante su aproximación inicial hasta situarse a cientos de kilómetros del fragmento de escombro. Después pasó al modo de aproximación autónoma, en el que intervino el sistema de navegación por imágenes.
Así, ADRAS-J consiguió acercarse a unos cientos de metros de los restos del cohete H-II. Desde esta distancia, fotografió la etapa superior. En la siguiente fase continuará la aproximación. La sonda también realizará varias maniobras alrededor de los restos espaciales para evaluar la dinámica de su movimiento y rotación.
La precaución es importante porque los restos pueden girar sin control. Esto dificultará su aproximación para capturarlos y desorbitarlos. También existe el riesgo de aumentar la cantidad de escombros si la sonda colisiona con ellos.
En realidad, para evitar tales problemas, se está llevando a cabo esta misión de demostración. Debería demostrar que existen tecnologías para investigar los restos para su posterior captura cuidadosa y llevarlos a las capas densas de la atmósfera, donde se quemarán.
